Las estancias temporales en residencias para personas mayores se han convertido en una herramienta esencial con grandes beneficios, tanto para los propios residentes como para sus cuidadores. Ambos son los protagonistas de este recurso que cada verano presenta una mayor demanda de solicitudes.
Uno de los elementos clave de las estancias temporales en residencias para personas mayores es proporcionar descanso y desconexión a las personas cuidadoras. Las familias, con su elevado compromiso de cuidados hacia los ancianos, pueden sufrir un desgaste físico y emocional diario que acaba por acumularse. Y es que, ya sea por una situación de carácter transitorio o definitivo, los cuidados que requiere una persona en situación de dependencia o con enfermedad neurodegenerativa severa son importantes y abrumadores. En muchas ocasiones, conllevan una responsabilidad ingente que impacta de forma considerable en el estado físico y mental del cuidador.
Por ello, es fundamental que, en determinadas temporadas, puedan contar con las plazas de estancias temporales en residencias para aliviar la ansiedad y paliar las tensiones derivadas del cuidado continuo. Además de estas ventajas, esta herramienta proporciona un conjunto de beneficios para los mayores y sus allegados que describiremos a continuación.
Aportes de las estancias temporales en residencias: asistencia plena y confort emocional
Las estancias temporales en residencias de mayores son una herramienta asistencial de gran apoyo para los ancianos que necesiten una atención especial. Los residentes con un determinado grado de dependencia o con enfermedades severas como el Alzhéimer, entre otras dolencias, necesitan una dedicación plena que los profesionales cualificados de las residencias están preparados para cubrir. Este tipo de plazas reúnen un grupo de beneficios para las personas de la tercera edad:
- Asistencia cualificada y adaptada: Los residentes y sus familias pueden tener la confianza de sentirse como en casa, gracias al cuidado completo realizado por un grupo de especialistas. Un equipo cualificado vela por la asistencia de los mayores durante las 24 horas del día atendiendo a sus necesidades individuales.
- Refuerzo de las habilidades físicas y mentales: Contar con una plantilla multidisciplinar que se ocupe de los mayores y los mantenga activos contribuye a fortalecer sus competencias y promover su autonomía personal. En el caso de la dependencia total, también es relevante esta aportación ya que motiva y ejercita ante el inevitable daño progresivo.
- Promoción de la integración social: Compartir la vida cotidiana con otros residentes es una fuente de ventajas. La convivencia común entre los mayores ayuda a intercambiar experiencias, potencia sus habilidades comunicativas y cognitivas y genera respeto a sus historias de vida. Al mismo tiempo, otorga una sensación de bienestar vital.
- Impulso a la participación en terapias innovadoras: Además de proporcionar el tratamiento y medicación pertinentes a los mayores, las estancias temporales de residencias ofrecen terapias no farmacológicas de gran utilidad. Un ejemplo de ello son las terapias con animales, que garantizan mejoras a todos los niveles, desde el estado físico hasta el psicológico.
- Estímulo del confort emocional: Las estancias temporales en residencias también resultan muy beneficiosas para las personas mayores porque favorecen un cambio en su rutina. Los mayores tienen acceso a otros ambientes y pueden disfrutar de un amplio abanico de actividades, que sirven para mantenerse o incluso mejorar su estado físico y cognitivo. Además, este cambio insufla aire fresco y propicia una renovación a los residentes.
Las residencias para mayores y centros de día Amavir ponen al residente en el centro de su actividad y lo sitúan como protagonista de su atención y cuidado. Los especialistas potencian su autoestima para el desarrollo de la vida diaria. Asimismo, las dinámicas que desarrollan fomentan el empoderamiento de las personas de la tercera edad con el fin de retrasar la aparición de la dependencia y de frenar otros trastornos derivados.
Descubre nuestro programa de respiro familiar para conocer aún más los beneficios de las estancias temporales en residencias para personas mayores.
Contribución de las estancias temporales para los cuidadores: descanso y desconexión
Una de las mayores contribuciones de las plazas temporales es el descanso de los cuidadores. En este aspecto, es importante recordar qué es el respiro familiar, uno de los servicios que ofrecen las estancias temporales en residencias de mayores de Amavir. Estos programas están diseñados para ofrecer un tiempo de relax de calidad a los allegados que acostumbran a cuidar de las personas de edad avanzada.
Se trata de uno de los mayores beneficios de las estancias temporales para los cuidadores, un apoyo fundamental para que, cuando se sientan sobrepasados por la atención dedicada al mayor, puedan mejorar su bienestar social y sanitario. Así, tras aprobarse la solicitud de respiro familiar, arranca el proceso de renovación del cuidador, que dispondrá de más tiempo para su propio autocuidado. Gracias a este dispositivo asistencial, el cuidador puede recuperar su estado de ánimo y reaprender a gestionar su salud mental y emocional.
Además, con las estancias temporales en las residencias se previene el síndrome del cuidador quemado, que a largo plazo puede acarrear graves repercusiones psicosociales. Entre otros efectos, la sobrecarga de cuidados puede generar agotamiento, irritabilidad, altos niveles de estrés y ansiedad, elevada autoexigencia y frustración. Muchos cuidadores terminan incluso por culparse y demandarse en exceso, dejando de lado sus propias necesidades y oportunidades de ocio y entretenimiento. Con el soporte recibido desde las estancias temporales salvan este tipo de sintomatología y frenan sus indicios.
A estos aportes de las estancias temporales en residencias para los cuidadores se une otro beneficio primordial: la tranquilidad que ofrece el saber que el familiar se encuentra en buenas manos. En líneas generales, contar con un equipo de especialistas que velen por la atención integral de los mayores es esencial para ellos, y les reporta mayor bienestar y calidad de vida.